Ayer en Coruña, junto al centro comercial Cuatro Caminos, un hombre sin hogar contaba sus monedas para comprar algo de comer. Detrás de él, sobre una valla, estaba colgada su manta. Unos adolescentes la tiraron al suelo mojado y se fueron riendo. Mi hija mediana, de 15 años, lo vio. Volvió a colgar la manta mojada sin que el hombre se percatara de nada y no se lo dijo. Le dio el único dinero que tenía, 20 céntimos, y se sintió muy mal por no poder darle más. Fue a casa, cogió una de sus sábanas, unas galletas y unas manzanas y se lo llevo al hombre, que ya estaba a punto de irse.
Mi hijo pequeño, de 13 años, cada día explica a sus amigas por qué algunos de sus ídolos tienen canciones que las humillan a ellas. A sus amigos les enseña a respetar a las niñas. Corrige a los adultos si su comportamiento es machista. También defiende a todo el que no puede defenderse solo y apoya a los niños con los que otros se meten. Por la calle, se para a hablar con los ancianos, algo que le encanta hacer desde muy pequeño, escuchar con atención y aprender de todo lo que le cuentan. Son sólo algunos ejemplos de que entre unos pocos podemos cambiar el mundo.
Profes, todos estos profesores magníficos que seguís a Crecer Creando, por favor, recordad que los niños también sufren depresión y, sin llegar tan lejos, pasan a veces por situaciones muy difíciles. Los adultos podemos coger una baja laboral a pesar de que ya sabemos comprender y gestionar mejor estos problemas. Ellos ni siquiera entienden qué les sucede. A veces, construyen un muro para sentirse protegidos y esto se puede malinterpretar. Vosotros tenéis un poder enorme sobre ellos, su vida, su visión de sí mismos y su futuro. Tenéis en vuestras manos el futuro de este mundo. Mis 3 hijos dan nombre a la marca de juegos matemáticos Crecer Creando, es un nombre con mucho significado en nuestras vidas.
A la mayor no la he nombrado antes porque es de la que más se habla, ya que por ella ha nacido Crecer Creando. Sin embargo, también ayuda cada día a mejorar este mundo, con gran fuerza y seguridad, yendo a contracorriente sin miedo.
¿Qué os parece si hoy todos hacemos algo por alguien que no sea demasiado cercano a nosotros? ¿Y si hacemos algo más difícil, observarnos a nosotros mismos y mejorar algo de nuestros hábitos? ¿Y compartirlo para que la cadena crezca? https://crecercreando.org
